miércoles, 22 de noviembre de 2006

El viaje continúa.

Mi mesa de trabajo hoy.

Soltando lastre. Cogiendo fuerzas. Supongo que algo hizo click cuando te oí hablar de aquel director de cine. O quizá, fue cuando nombraste a Vermeer. Tal vez, fue la gracia con la que resonaba tu voz de acento andaluz en mi cabeza. Tu forma de bailar. Quizá fueron las cinco horas que pasamos juntos. Ahora pienso que el amanecer puede que fuera lo que dejó esa cicatriz en mi memoria. Lo que ha borrado lo anterior.
Nuevas estaciones.

Escucho: Muse. Starlight.

No hay comentarios: